La Cueva

No fue el mejor día del mundo, fotográficamente hablando. Esa mañana madrugué para fotografiar Buitre Leonado. Al llegar al lugar, comenzó a lloviznar, esa llovizna que parece que no moja, pero cuando pasa un rato te encuentras totalmente empapado. No pudo ser los buitres y, mientras paseaba por la zona, maldiciendo mi mala suerte, me percaté de este agujero, a modo de cueva, en un árbol, del que salía, tímidamente, esta minúscula seta.